Es obvio que Eudald Carbonell no es un hombre común. Probablemente sea uno de los mayores expertos a nivel mundial sobre eso que se conoce como “ser humano”,
El profesor Dr. Eudald Carbonell, es Vicepresidente de la Fundación Atapuerca y Director General Co-Director de la excavación en los Yacimientos de la Sierra de Atapuerca.
Catedrático de Prehistoria de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona e Investigador principal del Grupo de Autoecologia Humana del Cuaternario de dicha universidad
En la COMUNIDAD TAG tuvimos el privilegio de poderle escuchar durante su conferencia “Una visión general de Atapuerca” realizada en el Fórum de la Evolución de Burgos con motivo de nuestro “Encuentro entre Amigos 2016”.
Nos explicó que la Sierra de Atapuerca es un macizo kárstico que contiene una ingente cantidad de información. Las excavaciones que el equipo de investigaciones de Atapuerca realiza sistemáticamente desde 1978, están sacando a la luz importantes fósiles que permiten escribir la historia del continente europeo y conocer cómo han evolucionado los diferentes grupos humanos en Europa desde hace más de un millón de años.
El día 8 de julio de 1994, la Sierra de Atapuerca reveló uno de sus secretos más sorprendentes. La excavación en el yacimiento de Gran Dolina había alcanzado ya el nivel TD6, que proporcionaba abundantes herramientas líticas primitivas y restos de fauna datada en unos 800.000 años. Aquel día se descubrieron los primeros restos de lo que sería una nueva especie humana: Homo antecessor. Fiel a su nombre, estos humanos fueron verdaderos pioneros del Pleistoceno. Atravesando miles de kilómetros de los más dispares paisajes, desde estepas a altas montañas, llegaron desde su cuna en África hasta el extremo occidental de Europa, donde encontraron un lugar idóneo para finalizar su peregrinaje: la Sierra de Atapuerca, paraje que les ofrecía numerosas cuevas como lugar de refugio, agua próxima, abundantes animales de caza, fuentes ricas en materia prima para fabricar sus utensilios de piedra y un clima templado y agradable.
Quizás por todo ello, Eudald Carbonell inicio su conferencia afirmando que el turismo tiene más de dos millones de años.
Actualmente se están trabajando en Atapuerca en ocho de los más de 200 yacimientos encontrados, con un equipo compuesto por más de 300 personas.
Nos impacta, y nos hace reflexionar, escucharle afirmaciones tales como “todavía no somos humanos”.
Nos explica que hacerse humano es un proceso. Ser humano significa tener conciencia de especie, y la evolución humana es el proceso de tomar esa conciencia. Lo humano es producto de la integración evolutiva que se basa en la selección cultural y técnica. La selección cultural nace de la selección natural, pero a diferencia de ella, la selección cultural dispone de la capacidad humana para la reflexión, el pensamiento y la ética.
Si nos tuviéramos que quedar con una sola frase suya, sin duda, sería: