Los efectos dañinos del estrés son más que conocidos. De hecho, que levante la mano aquél que no haya sufrido alguno en algún momento. Desde migrañas, insomnio y dolores estomacales hasta los peores, problemas cardiovasculares.
Romper con la rutina laboral es muy importante y necesario para el cuerpo y mente, casi comparable con dormir nuestras 8 horas diarias. Y es que más allá de tomarse un descanso para disfrutar y relajarse, las vacaciones aportan a nuestra salud bienestar mental, emocional y físico, e incluso trascienden al mundo laboral: tienen un impacto muy positivo en la productividad.
Pero vayamos más a fondo… ¿cuáles son los principales beneficios de las vacaciones?
Efecto protector ante la depresión
Tal y como hemos dicho, las vacaciones mejoran la salud mental y física. Cuando hacemos planes y disfrutamos del tiempo libre nuestros niveles de serotonina y dopamina aumentan, especialmente cuando viajamos. Estos neurotransmisores, recordemos, ayudan a regular las emociones, las cuales tienen efecto en nuestra autoestima, aumentándola y ayudándonos a hacer una mejor gestión emocional.
Revitalizador de nuestro cerebro
En la línea de la salud mental y física, las vacaciones, así como nuevos estímulos y experiencias, impactan en nuestro cerebro propiciando la creación de nuevas conexiones entre neuronas, hecho que, entre otras cosas, aumenta nuestra capacidad de adaptación. Además, cuando estamos de vacaciones tendemos a dormir más horas y el sueño es de mayor calidad!
Más creativos
En nuestro día a día, son pocos los estímulos que recibimos más allá del ordenador, el teclado y los emails. Los nuevos inputs que recibimos fuera la rutina y cuando cambiamos de entorno nos ayudan a entender que no hay una única forma de ver y hacer las cosas. Nuestra mente se siente más libre e innova con mucha más facilidad.
Afrontamos de diferente manera los problemas
Alejarnos y ver con perspectiva algunas de nuestras preocupaciones nos dejan ser más objetivos y más eficaces a la hora de solucionar los problemas.
Potenciar las relaciones
Las vacaciones nos ayudan a revitalizar relaciones de pareja, amigos, familia e incluso compañeros de trabajo al distanciarnos del contacto diario.
Irse de vacaciones no tan solo implica no ir a la oficina ni teletrabajar. Implica desconectar al 100% del trabajo: ni emails, ni teléfono, ni pensar en ello. Aire nuevo y detox laboral.
Así que…buenas vacaciones y … ¡Nos vemos a la vuelta, más y mejor!